miércoles, 11 de enero de 2023

EL PRIVILEGIO DE SER LLAMADO CRIADOR

  

   Estoy convencido de que no voy a ser nada original, tampoco lo pretendo; sin embargo, no es menos cierto que iniciar un escrito con este titular conlleva implícitamente una serie de postulados, de convicciones y de acciones que tienen en el devenir del tiempo unas consecuencias que quedan plasmadas a lo largo de todo el proceso.

   La crianza canina se ha venido desarrollando a lo largo de la historia de la domesticación de los animales, con el fin de producir ejemplares con unas características definidas que pudiesen cumplir con unas funcionalidades específicas, por ejemplo, en el trabajo de pastoreo con los rebaños, en las tareas de protección o de caza.

   La cría selectiva es un procedimiento que nos permite criar intencionalmente perros seleccionados para producir y conservar algunas características físicas, comportamientos, salud, capacidad y habilidades que permiten realizar tareas específicas.

   Durante siglos, el ser humano ha utilizado la cría canina para mejorar las habilidades propias de una raza para aprovechar las funcionalidades en la sociedad: perros policía, perros de rescate, perros de detección, de asistencia a discapacitados, perros guía para invidentes, etc. Cada raza es el resultado de años de planificación y de un trabajo intenso a lo largo de los siglos.

   Mantener todo este legado esta en manos de criadores apasionados que trabajan en pro de preservar todas las características intrínsecas de cada raza con un gran esfuerzo en adquirir el máximo conocimiento de la cría.

   La cría profesional y responsable exige conocimientos complejos. Deben aprender conceptos sobre biología y reproducción canina y por supuesto conocer en profundidad la raza que cría. Deben saber como cuidar y criar los perros para garantizar su salud y bienestar. La nutrición, el desarrollo biológico y comportamental, así como las pruebas de salud regulares tienen un papel esencial en todo este proceso.

   Para los criadores responsables, la cría es pasión, conocimiento y compromiso para trabajar en pro de conservar y mantener la raza para el futuro gracias a un buen trabajo de selección, no es un capricho temporal sino un trabajo de amor por la raza elegida; un compromiso de responsabilidad ya que nuestras decisiones al traer al mundo seres vivos van a incidir de forma absoluta en las vidas de las familias de las que formarán parte.

   La crianza requiere mucho tiempo y grandes esfuerzos en todos los ámbitos, debe ser algo que conmueva y que no se base en el interés pecuniario únicamente. Para producir cachorros sanos y equilibrados se elegirán con esmero los reproductores, haciendo las debidas pruebas médicas, tanto genéticas como morfológicas y ofreciendo a los cachorros un entorno apropiado para que disfruten de una socialización y cuidados adecuados.

  Que diferencia la cría realizada con ética y responsabilidad de la cría indiscriminada??

   Un criador responsable trabajara para la mejora y conservación de la raza y un criador sin escrúpulos ve la cría como una fuente de ingresos ignorando las necesidades de los perros y todo ello se traduce en numerosos problemas de salud, bienestar y comportamiento. No se va a negar que el criador responsable obtendrá un justiprecio por su trabajo y dedicación para compensar todos los costes de mantener sus ejemplares en perfectas condiciones de salud y bienestar. En un porcentaje muy elevado,  la crianza no será su única fuente de ingresos.

   Un criador responsable no vende un perro, sino que entrega un compañero para muchos años a una familia que previamente ha podido contrastar su compromiso para dotar del mejor entorno para el cachorro y darle una vida confortable.

   Adquirir un cachorro en un criador responsable implicara sin duda una espera larga o muy larga en el tiempo ya que tiende a criar un número limitado de camadas por año. Un criador responsable siempre estará dispuesto a facilitar a las futuras familias toda la información necesaria de la raza que cría, estará dispuesto a contestar cualquier pregunta y dar todo el apoyo previo y posterior a la entrega del cachorro; sea en temas de nutrición, vacunaciones, socialización, etc y  estará dispuesto a permitir que las familias conozcan a los ejemplares que convivan con él y la interacción de estos con los cachorros nacidos en su casa.

   Un criador responsable entregara un contrato con todas las garantías que por ley se le exigen y que, por ética y responsabilidad no rehuirá ya que con ello confirma su compromiso de, llegado el caso, recuperar al cachorro si no pudiese ser cuidado debidamente para procurar un nuevo hogar donde pueda ser acogido con todas las condiciones de bienestar necesarias.

   Un criador responsable registrara todos sus ejemplares en una Sociedad Canina para certificar su pedigrí. Ese documento certifica que el perro es de pura raza, constará en él toda la información que lo identifica como único, como numero de microchip o tatuaje, resultados de pruebas de salud, ADN, etc  Es el árbol genealógico de varias generaciones de un trabajo realizado por varios criadores de forma concienzuda y responsable.

   Por todo lo expuesto en este escrito puedo afirmar qué, ni todas las horas de sueño perdido, ni los años sin vacaciones, ni la renuncia a comodidades materiales han hecho mella en nuestro sueño , nuestra pasión, llevada de una forma humilde y ante todo honesta ya que compartir cada día con nuestros compañeros , jugando y riendo con ellos y en ocasiones también llorando con y por ellos, demuestran que el día que decidimos dedicarnos a la cría fue la decisión mas importante en nuestra ya dilatada vida.

   Solo añadir que tal como he decidido titular el escrito, sentimos una enorme satisfacción y un inmenso privilegio cuando nos llaman criadores. 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario